jueves, 6 de mayo de 2010

Hambre

Te me antojas,

dulce, ácido,

amargo, al punto de sal.


Me apeteces,

a mordiscos, lametones,

bocaditos y grandes sorbos.


Te me encaprichas,

caliente, tibio,

con las manos heladas o los ojos hirvientes.


Te ansío con rotunda voracidad

e insaciable apetito,

aderezado sólo con tacto, y especiados aromas.


Pero esta hambre no es lujuria,

que dicen que es pecado,

y está mal,


lo que tengo yo en el vientre,

aquí en la boca del estómago

Es simple y llanamente, gula corporal.


6 comentarios:

Secilla! dijo...

Me gusta mucho!
Cada cosa que escribes mejora :D

Cuentista dijo...

Lo mismo digo poetademierda. Va a más yo creo!
Los ultimos seis versos son cadencia!!

Leonardo dijo...

...la opinión es fácil… y la mía es humilde, no soy quien para juzgarte...
...solo quiero confesarte, que en ti existe eso que llaman arte...
...loca no dejes de esforzarte… que estos flacos quieren comentarte...
...un saludo te deseo más renglones conjugados con tu lápiz, dando forma y sentido a lo que
solo..
...vos ves con tus oídos...(no pares amiga)

Unknown dijo...

Me has contagiado, has despertado mi apetito.

Gracias por tus comentarios esdrújulos y por seguirme.

Juan Carlos Loaysa dijo...

Hace una eternidad que no te dejo un comentario, ya me he puesto al día en tu blog y estoy reparando mi descuido :P
Estoy con todos tus comentaristas, tus poemas van a mejor cada día, aunque es solo mi opinión. Sigue así!

Anónimo dijo...

Muy bien...

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