En este precioso instante
en que yaces derrotado
por la batalla lidiada
hace apenas un suspiro,
consigo deslizarme
al margen de los segundos,
al primero de tu alma.
Aprendo a tientas tus trasfondos,
al revés y derecho te imprimo.
Elevo tus triunfos
a lo más alto,
para que las derrotas,
queden mucho más abajo.
Te aprendo, te gano, te vivo
sin que sepas de mi ahínco
por ganarte, por tenerte,
por convertir este instante
en efímero, y en eterno.
7 comentarios:
Me encanta Esther, muy bueno, muy sincero y muy sencillo de sentir =)
Vivan los sentidos que se dejan leer!!!!
Hermosa unión de amor real e ideal, paciente y obsesivo. Miguel.
Mmmmmmmmmmmmmmmmmmmhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhh, it's great!
Me encanta. Muy Benedetti si le das la entonación correcta.(Irene Leo)
Me encanta lo que expresa este poema, pero le veo un poquito de falta de musicalidad. Las palabras deben fluir solas, y a veces se nos atrancan entre verso y verso... Pero es un poema muy sentido, y he logrado empatizar con él.
"Elevo tus triunfos
a lo más alto,
para que las derrotas,
queden mucho más abajo. "
No dejes nunca de regalarnos tus palabras.
Hola!
Te tengo que saludar porque hace milenios que no te dejo un comentario. Me he puesto al día, pero veo que tu producción ha disminuido. Espero que sea el mucho trabajo y no el "desfavor" de las musas. Mucho ánimo con todos tus proyectos :)
Te espero al atardecer en Hibernia.
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